Metales utilizados en las estampaciones metálicas

Las estampaciones metálicas son un tipo de proceso de fabricación por el cual se somete un metal a una carga de compresión entre dos moldes. La carga puede ser aplicada progresivamente a presión o de percusión, para lo cual se utilizan prensas y martinetes.
Los moldes son estampas o matrices de acero, una de ellas deslizante a través de una guía, sea un martillo o estampa superior y la otra fija por un yunque o estampa inferior. Esta técnica se puede realizar en piezas de materiales como el acero, latón, acero inoxidable, cobre, aluminio y las aleaciones no férricas del bronce, obteniendo un trabajo de alta calidad atado a procesos donde cuidan los resultados y se buscan detalles y piezas perfectas.

Tipos de estampaciones metálicas

La principal es la estampación caliente, este se realiza con el material a mayor temperatura que la temperatura de recristalización que en el caso del hierro es de 910ºC, el producto obtenido posee menor escabrosidad (mecánica) y exactitud dimensional que cuando se trabaja en frio por la ventaja de obtener mayor deformidad cuando el material es trabajado en calor.
Al frio la estampaciones metálicas se realizan con el material a menor temperatura que la temperatura de recristalización, por lo que se deforma el grano durante el proceso, obteniendo anisotropía en la estructura microscópica, suele aplicarse a piezas de menor espesor que cuando se trabaja caliente usualmente son chapas o láminas de espesor uniforme.

Evolución e historia

Desde siempre la presión ha sido una de las formas principales para trabajar el metal, las estampaciones metálicas se remontan a los inicios de la herrería y otros trabajos con metales, variedad en la temperatura del metal y los golpeas exactos realizados en el mismo fueron ideal por mucho tiempo, hasta que en el siglo XIX se vio un cambio importante con la implementación de la maquinaria al proceso de estampado de metales.
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