26 Jul Automatizar una máquina. Una decisión que no es definitiva aún
¿Automatizar una máquina o no hacerlo? Parece ser ese el paradigma del mundo moderno. La línea de producción de la industria necesita cada vez menos mano de obra humana. Máquinas, robots, computadoras resuelven problemas con la velocidad y la eficiencia que a menudo es difícil encontrar en humanos.
Algunos procesos de fabricación, esencialmente los de mecanizado e inyección, permiten automatizar una máquina o la totalidad de la línea de producción. Ya en los procesos de montaje e inspección, se suele hacer una selección y revisión en la que se puede utilizar personal humano. Sin embargo esta decisión depende de los niveles de calidad y excelencia que ofrezcan las máquinas automatizadas.
Si suponemos que un poco más del 98 % de la producción tiene niveles de calidad de excelencia, no habría justificación para utilizar seres humanos que solo tendrían la función de detectar menos de un dos por ciento de productos defectuosos.
Automatizar una máquina representa una inversión alta, que tiene un retorno rápido… eso debemos admitirlo. Sin embargo, la automatización de una sola máquina, deja sin empleo a dos o más personas.
Aunque ya hemos discutido este tema en otras entradas, vale la pena darle un nuevo enfoque: Automatizar una máquina nos obliga a desplazar tres trabajadores. Sin embargo, en un futuro cercano, el producto que estamos fabricando, tendrá un precio menor al consumidor y tendrá un nivel de excelencia que lo hará atractivo. Hasta ahí continuamos con tres trabajadores despedidos y sin empleo.
Pero si uno de esos trabajadores, es sometido a un proceso de capacitación y entrenamiento, que le permita vincularse nuevamente a la empresa, en un cargo diferente, ya no tendríamos sino dos desempleados.
La compañía ha aumentado la producción gracias a la automatización. Igualmente ha mejorado la calidad y por supuesto los precios son menores. Hay oportunidad para que tres o más personas se vinculen en el área comercial. El conocimiento que tienen del producto y del proceso de producción resultará fundamental en el éxito de su gestión.
Ya no tenemos tres desempleados como consecuencia de automatizar una máquina. Hemos generado un empleo. Si magnificamos el ejemplo que hemos presentado con una máquina, podríamos en el futuro estar hablando de la automatización como la nueva revolución industrial.
No olvidemos que tuvimos tres trabajadores sin empleo por un periodo de tiempo indeterminado. Es claro que no todos los trabajadores tendrán una oportunidad y talvez no todos estén dispuestos a aceptarla, pero es una luz al final de un túnel que ya estamos recorriendo y que sin duda tiene que tener algo muy bueno al otro lado.
Nos gustaría tener tus comentarios sobre estos temas, que finalmente nos atañen a todos, como sociedad y como trabajadores del siglo XXI. Si tienes algún comentario, por favor pincha aquí.